lunes, diciembre 11, 2006

La carta de la Maga al bebé Rocamadour

¿Hay algo tan perfecto como ese monólogo a cuentas que hilan el mundo, y la casa, y los hombres, y al pobre conejito, y a ese bebé en manos que se esconden detrás del delantal?

¿Hay algo tan perfecto como esa voz de erres infinitas, de erres carretera, que se alargan y bailan solas tropezándose, moviendo las patitas hacia arriba?


La Maga es un delirio
el final de la escalera que no tiene fin,
y esas esquinas del encuentro
a deshoras.

La Maga es el delirio
jugando a la acidez del sexo,
a la ternura,
a pliegues de callejón sucio,
a cáscaras de Montevideo.

La Maga es remolacha
y novelas arlequín
y dedos absurdos y hacia dentro.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

curiosamente ando devorando Rayuela ;-)

y que maravilla, eh??

Un besote, preciosa


PD: me encanta este cachito:

"Nuestra verdad posible tiene que ser invención, es decir escritura, literatura, pintura, escultura, agricultura, piscicultura, todas las turas de este mundo. Los valores, turas, la santidad, una tura, la sociedad, una tura, el amor, pura tura, la belleza, tura de turas."

claradriel dijo...

Rayuela completita es un delirio, que te envuelve en sus palabras de doble fondo, o eso crees, cuando das la vuelta y ves que aún hay otras puertas que llevan más allá.
Sin duda, todos aquellos que esconden sus manos son malignos, porque las manos también son el espejo del alma. Y porque la Maga es una visionaria, y sus impresiones son las del corazón del mundo.
Yo desconfiaría de todo aquél que no aprecie este libro.


Y pensar que es un lugar irrecuperable, Rayuela es como Macondo. No es París, Montevideo... es ese no-lugar donde querría perderme, y que me haría huir de los referentes reales que se nombran, porque en ellos no queda más que la sombra de ilusión.

O no... (SPOILER):
Aureliano podía imaginarlo entonces con un sueter de cuello alto que sólo se quitaba cuando las terrazas de Montparnasse se llenaban de enamorados primaverales, y durmiendo de día y escribiendo de noche para confundir el hambre, en el cuarto olororos a espuma de colifrores hervidos donde había de morir Rocamadour.

Me encanta la intertextualidad, cuando me sabe a magia.

Besos, preciosa. Echaba de menos retacitos de tí.

Alice ya no vive aquí dijo...

Me has enternecido, y no puedo explicar por qué :´)


Voy a releer Rayuela, hace demasiado tiempo.

Sí, mucho.

Yo era otra persona incluso.

Sofia dijo...

Hola el capítulo 32 es hermoso simplemente maravilloso, deja derramada la escencia de los personajes desde el punto de vista de la maga y a ella deja envidencia también su forma natural de ser, es la carta para su hijo, es bella, la la he lído muchas veces. He leído Rayuela un par de veces, mi novio me dijo que yo era como La Maga, a veces lo creo.
De lo que estoy segura es que Rayuela es un libro increíble. Y si, me gusta parecerme a La Maga. Bonito blog

pavenecia dijo...

no, no hay nada mas perfecto.

mAgA LaLaLa dijo...

Me encanto:
"La Maga es el delirio
jugando a la acidez del sexo,
a la ternura... es remolacha
y novelas arlequín
y dedos absurdos y hacia dentro"

La maga me enseño que el absurdo de la vida se puede disfrutar, que aunque oliveira sea tan niño esta para eso, para jugar a la ternura. Ea, por Rayuela!